EL ASUNTO LEVANTE

Saludos.

Estamos asistiendo etos días a las declaraciones de los jugadores del Levante sobre la convocatoria de huelga para el partido de la semana próxima.

Arguyen que no cobran (alguno, desde hace dos años) y como cualquier otro trabajador, un futbolista tiene derecho a cesar en su actividad laboral cuando las condiciones así se lo aconsejen.

Nada que reprochar.

Lo que ocurre es que un hecho de esta magnitud no se queda solo en la relación laboral de estos trabajadores y su empresa. Hay mucha más gente afectada y no todos de igual manera.

Si el Levante no se presenta a ése encuentro, le darán el partido por perdido y le otorgarán los tres puntos en juego al contrincante (el Huelva). Pero si volvieran a hacer lo mismo en le siguiente, el Reglamento de la Federación dice que lo descenderían, automáticamente, dos categorías.

Además, anularían los partidos de LA SEGUNDA VUELTA, otorgando los tres puntos a cada uno de los equipos con los que jugó.

¿Qué puede ocurrir? Pues que equipos como el Betis, que perdió su partido, puede ser "premiado" con tres puntos POR PERDER. El Sevilla, que ganó, se queda igual. No recibe "premio" por GANAR.

Dada la clasificación actual de la Liga, unos perderían muchas opciones de entrar en competiciones europeas (el Sevilla, por ejemplo, dado que el Racing, que solo empató, puede "recibir" dos puntos por la cara) y otros se librarían del descenso por hacer una campaña de pena (el Betis, por ejemplo).

¿Y qué pasa con los sancionados, los lesionados, los gastos...?

¿Se retiran las sanciones a quienes ya las hayan cumplido?

¿Y las lesiones? ¿Qué hacemos con los que hayan estado días o semanas sin jugar, perjudicando el rendimiento de su equipo en otros partidos que quizás perdieran?

Me pregunto qué pasó al inicio de la temporada, cuando los equipos deben presentar los avales, para que le dieran el beneplácito. ¿Dónde estaba la AFE si es verdad que hay jugadores que no cobran desde meses antes?

Ningún club, lo dice el Reglamento, puede jugar teniendo deudas con sus jugadores. ¿Porqué el Levante fue autorizado a jugar?

Mientras, los directivos/empresarios del club pueden salir de rositas. En un país de empresarios mafiosos, éstos mafiosos empresarios se irán y dejarán embarradas a las familias de los jugadores, porque les importa un pepino la vida de los demás, la afición de las gentes y los sentimientos de los miles que animan cada domingo a su equipo.

Esta gente (y conocemos más casos, alguno muy cercano), se pasea levantando la barbilla y nadie, nadie, le puede meter mano.

¿O es que no se quiere?

¿Qué misterios esconden estos tipejos para hacer y deshacer a su antojo sin que nadie ose hurgar en sus números?

Vamos a desear que se encuentre una solución pronta para que esas familias puedan recibir los frutos de sus trabajos y vamos a desear que la Federación (el nido de la víbora), encuentre una solución que no perjudique a tanta gente.

Estaremos pendientes.

Cuidaros.