Saludos.
El humanoide aprendió a matar y ya todo fue distinto.
En 1968, Stanley Kubrick dirigió un clásico del cine de ficción científica llamado “2001: Una Odisea del Espacio”. Basado en un relato corto, El Centinela, de Arthur C. Clarke, Kubrick y el propio científico/escritor crearon un guión donde trataban de mostrar la evolución del hombre, la ciencia y la vida extraterrestre.
HAL 9000, el inquietante robot que simbolizaba el poder de la tecnología y que controlaba y veía todo.
Enfrentados a sabidurías superiores, los pobres terrícolas debieron pasar por distintas fases evolutivas (quizás podríamos habernos ahorrado la parte sangrienta de toda ésa historia) hasta alcanzar el estadio superior: dioses o semidioses.
Aunque mirando la siguiente imagen, quizás llamarlo “evolución” sea excesivo.
Sospecho que en el árbol genealógico de algunos individuos contemporáneos se han saltado algún paso. O dos.
La mayoría, sin embargo, está a las puertas de alcanzar el título de “Homo Técnicus”.
La técnica, las técnicas, las ciencias… poderes extraordinarios en manos de cerebros limitados, capaces de lo mejor y de lo peor, de milagros y de apocalipsis.
Las ciencias son instrumentos necesarios (como lo era la capacidad de matar) en el desarrollo humano y sería impensable el futuro sin ellas. ¿Podremos, por ejemplo, viajar en el tiempo en décadas venideras?
Tal vez. De momento debemos mirar el pasado rastreando huellas, hurgando, midiendo pisadas, huesos, señales y carbonos. Hasta la prensa sirve a los propósitos del curioso y del investigador,
Por eso, atisbando los tiempos del futuro podremos decir, como Kubrick, que “algo maravilloso está a punto de suceder”.
En 2012.
Cuidaros.
2 comentarios:
Efectivamente Kubrick dijo que algo maravilloso está a punto de suceder...
Pero también dijo que aparece el hombre civilizado, racional, científico... y algo no funciona.
Noche de ilusión para muchos.
Cordialidad para Vd.
Saludos.
D. Marcu, no podemos hurtarle a la Naturaleza su derecho a crear una distorsión.
Sin embargo, debemos dudar de la capacidad de ésa Naturaleza que es capaz de crear su propio cáncer interno, el monstruo nacido en su seno y que la destruirá.
¿Habría Naturaleza sin humanos? ¿Cómo sería?
La propia Naturaleza necesita un referente que la observe aún a riesgo de ser engullida por este agente endógeno.
Nada se destruye, todo se transforma y nadie puede adivinar la siguiente fase, sea cual sea, porque quizás haya un guión escrito en alguna parte y solo seamos una página del libro. Dos líneas o la conclusión.
Gracias.
Cuídate.
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