sábado, 29 de octubre de 2016

EL MARINO (III)

 

Saludos.

Si recuerdan el capítulo anterior, el cronista de ABC señalaba que estuvo “secuestrado en las kabilas marroquíes". Este presunto secuestro tuvo lugar en 1905 y como parece un episodio más que relevante, tendremos que profundizar en él porque fueron tiempos especialmente movidos en una vida larga y ajetreada como pocas. Otros episodios vendrán más adelante que trataremos de contar.

El diario "La Época" de Madrid, en su edición del 1 de noviembre de aquel año y firmado por M. Enciso, publica una columna en la que da cuenta del extraño suceso y sus dudas sobre la veracidad del mismo. Cuenta, además, un incidente anterior delirante y hace una nueva semblanza de nuestro personaje porque, como estamos comprobando y seguiremos descubriendo en éste y próximos capítulos, la azarosa vida de Paco era fuente de inspiración para cualquier periodista durante años.

La rocambolesca historia comienza así:

clip_image002

Enciso, que parece conocer a nuestro hombre, se plantea serias dudas sobre la veracidad del asunto y nos narra otra anécdota similar, de la que fuera protagonista él mismo, aunque el grado de tragedia fuese mucho mayor.

clip_image004

No nos cuesta nada imaginarnos el vuelco que le pegaría el corazón al pobre hombre siendo abrazado por el "difunto" Palomares.

clip_image006

Lo describe en su desafección religiosa, en su gusto a las juergas y en su trágica tarde de novillero que leíamos en el entrega anterior. Enciso vierte datos de la vida de Paco con profusión, parece conocerlo bien, como vemos, y haber seguido su historia personal. Ésa anécdota en la iglesia de Cádiz nos revela un cierto grado de intimidad o amistad entre ambos. Sin embargo y sorprendentemente, desconoce que en efecto, Paco fue marino y capitán de barco.

clip_image008¿No sabía Enciso de la faceta de navegante del novillero? Y aunque ello no desvirtúa del todo su reseña, le resta un cierto grado de credibilidad. Para terminar y tras hacer una truculenta descripción de aquella novillada, Enciso concluye su trabajo dejando un regusto de enemistad entre periodista y aventurero con una frase lapidaria:

clip_image010

clip_image012Y para corroborar que el secuestro no fue real, tomemos lo que publica El País del 16 de enero

citando al ministro, probablemente el de exteriores, quien señala que Palomares le ha escrito diciéndoles que se encuentra en Gibraltar.

¿Fue todo inventado? ¿Con qué propósito? ¿Qué relaciones mantenía Palomares para cartearse con un ministro?

Dejemos ya el asunto del "fallido" secuestro porque en nuestra labor detectivesca, una vez que nos hemos prendido del personaje y nos empecinamos en seguirle la pista, volvemos a descubrir otro aspecto más del poliédrico Paco:

clip_image014

¿Se editó realmente ése quincenal? No, no sabemos con seguridad si éste "El País" llegó a ver la luz (ya existía el diario republicano que se publicaba en Madrid con el mismo nombre). Hemos investigado exhaustivamente (llegando incluso a consultar directamente a la Facultad de Periodismo de la Universidad de Sevilla) sin éxito. Puede que sí pero no podemos manifestarnos en ningún sentido puesto que no hemos logrado verificarlo. Lo dejaremos, pues, en el limbo de las abundantes dudas y certezas de los hechos de Paco.

Sí sabemos, sin embargo, que la pasión editora, creadora y artística de Paco lo acompañarán toda su vida. Por ejemplo, vean esto:

clip_image015

Haciendo juego de letras con "aceite", publica lo que hoy denominaríamos con el anglicismo un "cómic" y sus viñetas, con dibujos estilizados y modernistas, reflejando una incisiva crítica social desde la percepción republicana de su editor.

Pero Paco Palomares, desde finales del siglo XIX, también escribía otras cosas. Solo o en colaboración con otros, creó o participó en más de una veintena de obras de teatro en diversos géneros: Siete Sainetes, cinco Zarzuelas, tres Dramas, tres Comedias, una Opereta, un Pasillo... probablemente hubo más. He aquí algunos de ellos:

clip_image017clip_image019clip_image021clip_image023clip_image025clip_image027clip_image029clip_image031clip_image033clip_image035clip_image037

Continuará.

Cuidaros.

 

 

Fuentes:

Moreno Martínez, Doris "El primer museo de la Inquisición en Sevilla". Universidad Autónoma de Barcelona

http://angelaysevilla.blogspot.com.es/

http://hemeroteca.sevilla.abc.es/

http://www.anglicanos.org/

http://iglesiadesanbasilio.blogspot.com.es/

http://protestantedigital.com/

http://gestauro.blogspot.com.es/

4 comentarios:

a-more dijo...

Gran trabajo de investigación. enhorabuena !!

Jose Manuel Ariza dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jose Manuel Ariza dijo...

Saludos.

Gracias, muy amable.

Cuídese.

Unknown dijo...


SIENTO DECIRLE QUE EN UNA COSA ESTÁ EQUIVOCADO...NO CONFUNDA EL RESPETO CON EL HUMOR. POR MIS PADRES SÉ MUCHAS COSAS DE LA VIDA FAMILIAR DE MI ABUELO Y ÉL ADORABA A SU PADRE; A SU MADRE, QUE ERA UNA BELLÍSIMA PERSONA; Y A SU HERMANA MARGARITA, QUE ERA LA ORGANISTA DE LA IGLESIA ANGLICANA REFORMADA QUE FUNDÓ SU PADRE. AMBOS HIJOS PERTENECÍAN A ESA RELIGIÓN Y LA RESPETABAN . MI ABUELO TAMBIÉN RESPETABA A LA IGLESIA CATÓLICA EN DONDE ENTRABA Y TENÍA AMIGOS MUY IMPORTANTES. A MI BISABUELO, QUE TUVO A SUS HIJOS MUY MAYOR, LE HACÍA MUCHA GRACIA TODAS LAS COSAS QUE HACÍA SU HIJO Y SUS RELACIONES ERAN MUY BUENAS. MI ABUELO SE EDUCÓ EN INGLATERRA Y SU EDUCACIÓN ERA ESMERADA, DE TODO UN CABALLERO...CUANDO IBA A CASARSE, MUY ENAMORADO, SU FUTURA MUJER LE HIZO FIRMAR UN DOCUMENTO POR EL CUAL LOS HIJOS QUE NACIERAN DE ESA UNIÓN SERIAN CATÓLICOS APOSTÓLICOS Y ROMANOS, Y ÉL LO CUMPLIÓ; POR ESO TAMBIÉN TENÍA BUENA RELACIÓN CON LOS CURAS. AUNQUE ÉL ERA MUY ANGLICANO, SU SIMPATÍA ROMPÍA BARRERAS.