domingo, 16 de junio de 2013

EL PEOR ESCENARIO POSIBLE

 

Saludos.

Hay un tipo de victimismo que daremos en llamar “positivo” y que remedando ése engendro que algún lúcido dio en llamar “discriminación positiva” (sobre la participación social de las mujeres y seguramente con la ¿feliz? idea de darle un más que dudoso plus a la aberración de considerar el género antes que los valores inherentes a los humanos per se), supondría que sintiéndonos perjudicados por algo o alguien y en alguna medida, pudiera no tener el carácter negativo que se le supone inicialmente aunque no deje de ser una consecuencia de actos reprobables. No obstante, siempre seremos muy libres de adornarnos con las propiedades o méritos que consideremos oportunos. O los deméritos.

Es conocido (por perseverante, cansino, aburrido y recurrente) el complejo de algunos verdes para tratar de justificar que sus muchas cualidades (en ejercicios esotéricos incomprensibles aún hoy), no sean más determinantes solo porque el despotismo blanco y rojo les impide alcanzar glorias que nosotros, los sevillistas, le robamos desde tiempos inmemoriales (“robar” es desposeer a alguien de algo que ya tenía previamente o, a lo sumo, solo se puede robar la “posibilidad de” y siempre en un ejercicio de futuro imposible e incierto).

Subyace, por tanto, la idea de que no importan tus méritos deportivos, de si eres buen o mal equipo, de si tus jugadores marcan muchos o pocos goles… no eres más y mejor porque otro no te deja y sin que interesen los dígitos en los marcadores cuando ahí, en los marcadores, está el juego mismo. Seguramente, de no existir el Sevilla el Betis atesoraría todas las copas y trofeos ya que, como vemos, se desprende que son suyos por naturaleza divina y solo la diabólica mano de Nervión interfiere y nos las quedamos para nosotros y para siempre.

Nada nuevo y hoy, 2013, aún se escuchan los ecos en zona verde porque alguien, otro iluminado, se encarga de recordarles su condición de víctimas incluso cuando y en tanto que, como veremos luego, unos “trabajan mucho y bien y otros, con menos esfuerzos, se llevan los mismos beneficios”, se piensa el ínclito, lo esgrime y narra sin pudor y le creen los adoctrinados.

Hemos tenido ése carga acumulada en Nervión (víctimas positivas) desde siempre, desde 1907 aproximadamente (puede ser, o no), cuando se crea un club para tratar de desbancar al único existente entonces. Partían necesariamente en segunda posición y salvo alguna escasísima y cortísima etapa puntual, nunca superaron al líder. Las distancias, según ha ido pasando el tiempo, no hicieron más que aumentar.

Temporada recién conclusa: Un Betis excesivamente premiado por la diosa Fortuna (que resultará decisiva siempre, nos guste o no y como a todos), les permite realizar una campaña extraordinaria, un campeonato bastante por encima de sus posibilidades reales de inicio y si atendemos a las calidades y cualidades de sus jugadores. Pero como Fortuna es caprichosa, les otorga el premio Europa. Felicidades, no obstante, porque se lo han ganado a base de goles. Punto.

[Sin embargo y si escucho los comentarios de muchos de los verdes que me rodean y casi sin excepciones, más parece un castigo.]

En Nervión, por el contrario, se firma un año desastroso, sin comparación posible con los vecinos y con una salida de carrera que auguraba cotas mucho más altas (atendiendo a cualidades y calidades de sus jugadores) Fortuna decide que a pesar de que la foto finish demuestra claramente que la camiseta verde entró antes que la blanca y roja, se clasifican juntos (mismo premio para distintos méritos) y los dos viajarán al viejo continente compartiendo ése honor. Premio que celebraban solos, con regocijo prematuro y ahora les hurtamos en su mitad con lo que de nuevo, otra vez, alimentamos sin quererlo, sin buscarlo y de rebote, el victimismo negativo porque la fiesta iba a ser total (encima y en Europa/abajo y en Chipiona) y ya no lo será tanto.

Es, no lo dudemos, una jugarreta: Fortuna se cachondea de nosotros (y de ellos) y nos coloca, como siempre y con reiteración, como el objeto odioso del victimario universal y eterno, potenciando de manera desmedida el tiro al plato lacrimoso (aunque no haya platos a los que tirar) y como y desde siempre también, tengamos las escopetas cargadas y listas para poder buscar enemigos cuando los amigos no cumplen. “En la paz, ármate para la guerra”. ¿Hubo paz alguna vez? Disparen a todo lo (colorao) que se menee, por principios.

Ya solo queda esperar cuánto tiempo permanecerán en el extranjero los hermanos hispalenses.

Dicen los que saben de esto que no hay nada como un “ménage a trois” (en los porcentajes que cada cual desee y pueda) y así, nosotros los sibaritas sevillanos, tenemos el capricho de meter a un tercero en la cama. Un tercero que aparece en nuestra alcoba tras muchos años de vagar en las oscuridades, de navegar en el submundo, de morirse y resucitar sin fin y de ser fleco impenitente; un tercero que se ha hecho una intervención de cirugía estética arábiga fenomenal (a base de dineros venidos de cualquiera sabe dónde y que por cierto y según parece, “por encima de sus posibilidades”) y que ahora presenta un físico estupendo. Tan atractivo se ha vuelto que los sevillanos no hemos podido resistirnos a invitarlo a la orgía.

Son, señoras y señores, las víctimas orientales. Y como siempre han tenido una “razón” en sus pretendidas ofensas capitalinas (da igual de qué se trate, ellos son los perjudicados si huele a Sevilla), éste año Fortuna (la odiosa), riza y el rizo y les atiborra de “argumentos” hasta amenazar con que revienten, pretendiendo apagar el fuego con gasolina. La digestión puede durarles todo un año y en función de la caminata sevillana (a la que asistirán solo como testigos plasmáticos cuando esperaban ser protagonistas), provocarles vómitos irrefrenables. Y cosas peores.

Estos, los azules, incluso acumularon más méritos que los verdes en la carrera, por lo que los sucesos posteriores les convierten en Súper Víctimas, amenazando seriamente a los verdes en su privilegiada posición de perjudicados mayores del reino.

Debe haber un verdugo para cada víctima o no se podría verificar la decapitación.

El “quítate tú que me pongo yo” confabulado desde occidente, donde residen las hordas blancas y rojas, las mafias y los poderes políticos y deportivos (todas tienen sus oficinas en Nervión, por cierto) ejecutan fatalmente al reo.

Nada que objetar a sus propios “méritos”, nada de mirar para adentro, nada de hablar de trampas, árabes, negocios, pagos, impagos y caudales. Nada. ¿UEFA? ¿TAS? ¿Eso qué es? La culpa es de Sevilla (sin F.C.) y Sevilla (sin F.C.) nos roba de nuevo.

Estos alumnos aventajados de los catedráticos verdes han empollado a fondo y realizado, con matrícula de honor, el Máster Superior de Víctimas del Mundo Mundial. En solo dos años han logrado potenciar hasta cotas estelares sus odios. Los otros llevan más de cien (o no) ejerciendo.

El “trois”, por tanto, se cierra con dos víctimas de buen ver y un victimario. ¿O era verdugo? Ménage en cualquier caso.

Éramos muchos y parió la abuela.

Y nosotros, los “víctimas positivos”, que no la doblamos, que sacamos las peores notas del trío, que hemos sido incapaces de ganarnos el derecho en los campos… apartamos a uno y nos subimos al mismo podio que otro, con, dicen, malas artes. Lo hicimos nosotros solos (nada de UEFA, TAS o RFEF, insisto) y ahora deberemos pagar las consecuencias porque seremos las víctimas de las víctimas. Y ello en el año, posiblemente, que menos (por no decir nada), intervención hemos tenido en los destinos comunes si es que hubo alguna.

Año de aceptación de nuestras propias deficiencias, sumidos en la grisácea realidad de un equipo inoperante y que sin embargo… Fortuna nos regala una sonrisa de oreja a oreja. Estábamos en la cola y dos se caen. Nos toca.

¿Qué hubiéramos escuchado, no obstante, si hubiésemos perdido un par de partidos más en casa? ¿Se dirían las mismas aberraciones que estamos leyendo por el oriente andaluz o al final de La Palmera? ¿Igual si el agraciado, en ambos casos, hubiese sido otro?

La carambola es alucinante: el Sevilla (sin comerlo, sin beberlo y que pasaba por allí), gana dos puestos teóricos y adquiere el derecho a viajar con sus bártulos por Europa. “Solo” porque dos lo hicieron fatal en los despachos y en las cuentas y les han pillado.

Si además atendemos a las simpatías ancestrales que despertamos los palanganas allende Nervión y aledaños (zona, junto con La Palmera, libre de catetismo porque ya con el propio cubrimos todas nuestras necesidades y no hay que importar de fuera), el potaje huele que alimenta. Mojaremos sopas hasta dejar los platos limpitos. De espetón, nada. Potaje.

Y todo un año para comerlo. Solo uno. De momento.

Cuidaros.

miércoles, 5 de junio de 2013

AREA DE HISTORIA

 

Saludos.

Desde el pasado día 10 de marzo de 2013, hace casi tres meses, el propietario de éste blog no es integrante del Área de Historia del Sevilla F.C.

Entré de forma discreta y voluntaria y he salido de la misma manera.

Tengo la “virtud” de llegar siempre tarde y marcharme antes de tiempo.

A los efectos oportunos.

Cuidaros.

martes, 4 de junio de 2013

NEVERENDING STORY

 

Saludos.

Así, tranquilos, sin prisa pero sin pausa, con la lentitud (y la certeza) de que nos precipitamos en el vacío al planeta Tierra, el de siempre, a la madre acogedora del “otro año igual”…

…a la historia de vender para subsistir (¿verdad D. Paco Gallego?) los pocos muebles buenos de la casa para rellenarla de aglomerado de Ikea, que debemos montar nosotros solos y con un manual enrevesado, de instrucciones incomprensibles, sin las herramientas adecuadas y solo una pequeña y tímida llave hexagonal para todo el conjunto…

…nosotros que durante un rato tocamos el manto de la gloria y se nos quedaron los dedos brillantes…

…a nosotros que tanto nos preocupa la economía de los más débiles mientras le hacemos el caldo a los ricos…

…nosotros que no conocemos palabras que están en el diccionario de la Real Academia desde hace siglos…

…nosotros que tenemos que ser obligadamente optimistas y que esperamos rozar de nuevo aquel manto porque alguien, en algún sitio, determine que los tramposos no deben estar ahí arriba y así nos sintamos agraciados por los errores de los demás…

…nosotros que no hicimos méritos para casi nada…

…nosotros que premiamos casi cualquier fracaso porque somos generosos…

…nosotros que ahora debemos hacernos fans (otra vez y van…) de otro Club porque allí tendremos un cacho de corazón…

…nosotros que de comernos el mundo por los pies ahora se nos indigesta una aceituna…

…nosotros, los grandes (¿con respecto de quién?), volvemos a mirar dentro para encontrar un rival para la fiesta del día después…

…somos nosotros, los de siempre.

Los mismos.

El sueño ya pasó. Despierten.

Pongamos los pies en tierra y apretemos los dientes.

Lo peor está por llegar.

Y sin embargo… ¡hasta la muerte!

Adiós, Jesús. Toda la suerte, amigo, ya que nunca podremos devolverte tanto fútbol y tantos minutos de gloria. Ahora los verán otros allá, a lo lejos, en el país de donde vino el invento y que tú has sabido reinventar como nadie.

Cuidaros.

Sevilla Football Club, since 1890.

domingo, 2 de junio de 2013

¿VINTAGE O RETRO?

 

Saludos.

CAMISETA-1 2013-14

No hay que confundir entre los términos retro y vintage ya que a menudo ambos términos se entremezclan. Cuando nos referimos a retro, se trata de objetos que evocan al pasado, pero que no deben necesariamente pertenecer a él, ni siquiera haber sido diseñados en otros tiempos, simplemente emplean la estética de otra época tratando de apelar a nuestra nostalgia. Por otro lado, vintage hace referencia al pasado a través de prendas u objetos que fueron diseñados y fabricados en la época a la que pertenece su estilo. Normalmente, el término va asociado a creaciones de grandes diseñadores que se conservan en muy buen estado y que tiene un gran valor económico, aunque también se puede emplear para cualquier cosa antigua que decidamos sacar a la palestra, siempre que tenga algo que aportar estéticamente, y no sea simplemente viejo.

No pretendo opinar sobre el diseño de las camisetas que se proponen para la próxima temporada (aunque tenga mis gustos y mi sentido estético y a veces me chirríen los engranajes internos o aplauda a rabiar, que de todo ha habido) porque debo entender que pertenecen al intrincado mundo de la economía del Club. Entiendo también que con cada nuevo sponsor, ésas marcas quieran establecer sus propias líneas y sus modelos (siempre que observen coherencia con los colores del Equipo y aunque no siempre sean tan fieles o adecuadas como deseamos. En cualquier caso, son fruto de acuerdos entre las partes) para, si consiguen llamar la atención, extender su negocio a otros clubes y aumentar sus ingresos. Es el mercado y es una inversión de la que se beneficia el Sevilla F.C.

La nueva marca pretende introducirse en el fútbol español y elige al Sevilla. Su primera apuesta es potente y generosa y elige al Sevilla F.C como adelantado, como punta de lanza.

[Warrior Sports viste al Liverpool en el Reino Unido, al Sagan Tosu de Japón, al Randers F.C. de Dinamarca y al Emelec de Ecuador en su estrategia de expansión mundial y pronto, seguramente, compitiendo con las grandes tradicionales]. 

Parece un buen negocio, a priori, para nuestro Club. Y lo consiguen los mismos que aprueban los diseños. Son los mismos aunque ésa parte, la económica, se pretenda ocultar con el contenido estético porque así le interesa a algunos. Al enemigo ni agua. Pisálo.

La venta de indumentarias suponen unos ingresos más (y nada desdeñables) en las cuentas del Club. Así, todo lo que incite a los aficionados a hacerse con ésos nuevos complementos (somos, no nos engañemos, bastante snobs en general o no se entendería que cientos de marcas nos creen necesidades ficticias en las que tarde o temprano, con pasión o forzados, con o sin medios, todos recalamos de alguna manera), entrará dentro de la lógica comercial y social de nuestros días.

primer

Este escudo es tan sevillista como éste otro.

ESCUDO SFC-1

Y no menos que este aunque se cambiara el rojo de las letras por el negro (no lo hizo Vizcaíno, por cierto):

ESCUDO SFC-ACTUAL

Aquel hermoso escudo bordado de siglas entrelazadas, lució en las camisetas de nuestros jugadores durante muchos años. Era nuestro símbolo. No lo diseñó Warrior ni Vizcaíno. Es tan escudo nuestro como el segundo y el tercero. Y mucho más antiguo.

ESCUDO LAFITA

Y es, además, un grandísimo homenaje a los que forjaron el Mas Grande Club del Sur, el Eterno Campeón de Andalucía. Y si eso no fuese suficiente, es, al final, una magnífica lección de Historia para tantos de esos marrulleros charlatanes y jartibles que, en su gran desconocimiento, esgrimen cuitas personales sin pudor y con temeridad rayana en el ridículo, cuando no caen directamente en él.

Hay algo peor aún que la ignorancia y eso es la perversión.

Por cierto y antes de que algún marrullero caiga en la tentación de lanzarme los Estatutos a la cara, sepa que la definición del Escudo allí recogida es más que deficiente. No se atengan a la literalidad o pierden.

¿Pasión por lo nuevo o resistencia al cambio?

Maticemos y usemos la esencia de los argumentos del Gran Marrullero.

En el fondo (sigamos sin engañarnos), querríamos ganar un trofeo (o dos, o más) importantes cada año. De suceder así… ¿a quién carajo le importaría si vestimos de rosa fucsia o de amarillo fosforito? Hagan cábalas y no nos engañemos, otra vez, a nosotros mismos por favor y sobre todo, no traten de engañar a los demás. Porque cuando solo el triunfo y solo ganar importa (el Gran Marrullero dixit), lo demás puede resultar accesorio y alguno debería releerse a sí mismo. El Gran Marrullero sobre todo.

¿Jogo bonito?

Sorprende (o no tanto), que cuestiones de tan relativa importancia (sin que se salgan de cauce en ningún momento sino más bien todo lo contrario) sean elevadas a niveles superiores, a supuestos atentados contra fundamentos tan cambiantes como el resto. A la inmediatez del hoy frente a todo lo demás y, especialmente, al pasado. El pasado (cuando no estábamos nosotros ejerciendo de estrellas) es bueno si fueron triunfos porque de los fracasos preferimos pasar página (hay quien soporta un pasado con más oscuros que claros y por eso se escuda en la supuesta malevolencia de los demás para justificar sus propias impotencias). ¿Cuándo empieza el pasado? ¿Desde cuándo contamos?

Poseemos Guardianes de Nervión, Guardianes de la Memoria y ahora aparece un tercer grupo al que denominaremos como “Guardianes de la Ortodoxia”.

Marrulleros y falsos apóstoles, reos de abrazar la primera causa que esgrima el populista paranoico de turno para elevarse sobre ¿qué? ¿Contra quién? ¿Qué guerra particular pretendemos elevar a conflicto universal? ¿Quién abraza ésas causas obtusas como si de cruzadas se tratara?

Son genéticamente béticos en sus formas y a pesar de que se desgañiten clamando su sevillismo. De ese puñado de béticos anclados en el victimismo que se consuelan en que a pesar de su perfección, es la malevolencia de los otros la que les impide alcanzar la cima. Infantiles, previsibles y cómicos.

Miren lo que dice éste:

Betico-Trianero

En leyendo solo la primera frase, todo lo demás es altamente significativo y se justifica por sí mismo. Y descojonante. ¿Encuentran, no obstante, similitudes entre los marrulleros blancos y los verdes? Yo sí. Muchas.

Bandera Mercantil SFC 1

¿Ésta otra maravilla también será objeto de crítica cuando ondee en el Estadio? ¿Otra cagada de Vizcaíno?

1890 ¿qué escudo y camisetas usaron entonces? Denles tiempo a los del Área de Historia del Sevilla F.C. para que lo descubran porque, no les quepa duda, ellos lo harán antes o después y cuando se muestre... algo tendrá que ver Vizcaíno, no lo duden.

Un día, cualquier día (más pronto que tarde), el Sevilla F.C. y la RFEF anunciarán que la fecha oficial de la fundación de nuestro Equipo es el 25 de enero de 1890. ¿Qué dirá entonces el Gran Marrullero? ¿Dirá que Vizcaíno se ha cargado el Himno del Arrebato?

¿Qué diremos cuando haya que cambiarlo todo y decir “Since 1890”?

Cuando cambian de manera accidental el modelo propuesto de rayas rojas y blancas por el blanco inmaculado, ése color (el blanco níveo) se convierte en el color oficial del Sevilla F.C. Un accidente, miren por dónde, y permanece ahí por más de ciento ocho años (al menos y hasta que los del Área de Historia muestren nuevas evidencias de su pasado, de que es mucho más antiguo o de que hubo otro u otros anteriores).

¿Y qué se dijo cuando cambiaron el rojo de las medias al negro tradicional, el del pasado?

Miren que con cada nueva andanada del Gran Marrullero, más cerca me encuentro de darle la razón a Vizcaíno y casi pensar que se extirpó el cáncer a tiempo, antes de la metástasis.

Las sociedades anónimas deportivas lograron usurparles casi todos los derechos a los socios, para bien y para mal, con lo que los destinos de los clubes se rigen por otros intereses. Ya no gobiernan los socios directamente y si todo vale debe valer todo. Ganar y lo demás (si pretendemos ser coherentes con nuestros discursos), es solo complementario e importante solo en la medida que queramos darle. Salvo aberraciones, que no es el caso ni de lejos.

Todo es tan relativo que espanta pensar en ello, D. Alberto. Nunca sabré si debo darle las gracias o maldecirlo por señalarnos nuestra insustancialidad.

1905

Cuidaros.