sábado, 26 de enero de 2013

ETAPAS DE MONTAÑA

 

Saludos.

Es probable que uno de los deportes más duros que existan sea el ciclismo, dicho desde el desconocimiento más absoluto porque yo aprendí a montar en bici siendo niño, parece que no lo he olvidado y ahí termina mi aventura con las dos ruedas. No obstante y teniendo en cuenta que la inmensa mayoría de esos deportes se basan en las capacidades físicas de los participantes, convendrán conmigo que subirse a una bicicleta, pedalear cientos de kilómetros, soportar temperaturas extremas (viento, calor y frío) y los desniveles del terreno a pecho descubierto, debe ser solo para gente especialmente fuerte y resistente. De otra clase de fibras.

No entremos en los “refuerzos” que se inyectan algunos para conseguir llegar los primeros a Les Champs-Élysées porque tramposos los hubo siempre.

En el ciclismo en ruta (Tour, Giro y Vuelta) se planifican las etapas diarias basándolas en la orografía y así las encontramos llanas (menos pesadas, de piñón grande y altas velocidades), de media montaña (repartidas con subidas y llanos, rompe piernas), las contra-reloj (técnicamente muy exigentes) y de montaña.

Las de montaña son ésa exigencia llevada al máximo exponente. Son  las realmente duras, las que deciden carreras y en las que una “pájara” inoportuna te mete seis minutos y fuera, no ganas.

Las de montaña, especialmente, se planifican cuasi modus militaris. Los directores de los equipos establecen los puntos de ataque, las “vigilancias”, los que deben “frenar” a los otros, quién debe tirar los primeros kilómetros, quién los otros y quién, al final, debe “subir” al líder para que logre el ataque final, la etapa.

Ayer viernes 25 de enero, en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuan, el Equipo del Líder Andaluz logró llevar  a su jefe filas, al Sevilla F.C., a la cima de una altísima cumbre y coronarla con éxito.

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No estuvieron todos los protagonistas (algunos especialmente importantes en el triunfo de la etapa y quizás exhaustos por el esfuerzo realizado), pero ahí nos presentamos los demás.

Carlos, Antonio, Juan Luis, Enrique, José Luis, Javier, Pedro, José María y un servidor (el que engrasa las ruedas de las bicis), los componentes del Equipo Blanco y Rojo.

Era una cima decisiva y la hemos superado.

Ciertamente que los otros Equipos (el Azul y el Verde), pugnan por intentar restar méritos a nuestro legítimo triunfo con artimañas y maniobras propias de quien no sabe reivindicar lo suyo si no es procurando desvirtuar a los otros. Ciertamente.

Pero los complejos de los demás nunca nos frenaron, nunca no apartaron en la búsqueda de nuestros objetivos y nunca, jamás, lograrán que renunciemos a reivindicar nuestro sitio exacto en la Historia. El nuestro, el que nos corresponde y con las “photo-finish” que sean necesarias.

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Ayer, 25 de enero, día en que nació Robert Burns, le pusimos al Sevilla F.C. el triunfo en sus manos.

Ahora a pedalear en llano, arropado por su Equipo.

¿Deberían olvidarse las viejas amistades
y nunca recordarse?
¿Deberían olvidarse las viejas amistades
y los viejos tiempos?

Por los viejos tiempos, amigo mío,
por los viejos tiempos:
tomaremos una copa de cordialidad
por los viejos tiempos.

Cuidaros.

1 comentario:

EL PAPI MAGASE dijo...

Pedazo de engrasador y pedazo de grasa la utilizada,todo el equipo cada uno en su misión,habeis hecho posible el cruzar esa ansiada meta en primer lugar,ahora que vengan las fotos filins que tengan que venir,el primero es el primero y el segundo es él que llegó despues del primero,un abrazo hermano y por supuesto me tomaré una o dos copas por los viejos tiempos y brindaré por los que están y por los que pusieron su granito también y se fueron sin ver terminar la etapa,Gracias otra vez aunque de golpe a porrazo nos hallais hecho mas viejos 15 años de golpe a porrazo.