domingo, 24 de junio de 2012

…PUENTE DE PLATA

 

Saludos.

“Se refiere esta expresión a la conveniencia de, no sólo no poner obstáculos, sino facilitar la marcha del enemigo o persona que nos estorbe, librándonos así de ella, sin esfuerzo ni pérdida de energías. Esta máxima militar, tan repetida, se atribuye a Gonzalo Fernández de Córdoba, llamado también El Gran Capitán (1453-1515).” (Miguel A. Pérez Abad)

En el argot popular se suele decir que no es una huida, que es media vuelta y avancen de frente, a toda máquina o a marcha forzada (a la carrera y como alma que teme al diablo).

Un cálculo sencillo de probabilidades (berenjenal para el que no estoy preparado porque yo soy de letritas) me advierte que no habrá concesiones a la verdad. Pero observado desde un punto de vista sicológico (ahí tengo 0,001% más de idea), lo mismo. En realidad estaremos asistiendo (ya estamos en ello con las primeras declaraciones que abundan en lo que decimos) a una “huida hacia adelante”, a un “negar la mayor”:

“La mayor alude a la primera premisa de un silogismo. Si alguien dice niego la mayor, lo que está diciendo es que no se cree la afirmación de la que parte un razonamiento, con lo que desacredita sus conclusiones; es decir, que le parece que el razonamiento está viciado desde el principio.”

Se puede negar directamente o por omisión interesada.

Visto así y desde una perspectiva que prefiero no contemplar, todo lo expuesto, todo lo demostrado, todo el arsenal de pruebas y documentos…

LA PALANGANA MECANICA

…no servirán para nada si no se quiere mirar. Volvemos a lo popular: “no hay peor ciego que quien no quiere ver”.

Hay muchas formas de desacreditar honradas profesiones y una de ellas, la peor, es la del vicio de parcialidad, el permitir que los deseos (las tripas) te puedan a la hora de los análisis, de la lógica documental y de la fuerza de las pruebas.

Hay profesiones que amparadas en las ideas de teóricos pretéritos (filosofía, por ejemplo), permiten el vertido de ideas propias, nuevas, distintas y diferentes que interpreten la realidad desde las ópticas particulares de cada cual. Todas son válidas y todas aceptables porque habrá tantos puntos de vista como observadores. Podremos rebatirlas, aceptarlas, participarlas, aplaudirlas o negarlas, pero son solo fruto de diferentes enfoques y solo por ello, merecedoras de respeto.

Otras profesiones, por el contrario, necesitan soportes específicos y especiales.

En una de ellas, la Historia, ésos soportes son absolutamente vitales y van desde análisis tipo Carbono 14, a la búsqueda de documentos en apoyo o detrimento de lo que pretendemos descubrir o estudiar. Hay pruebas de testimonios grabadas en piedra (Rosseta y Champollion) que nos abrieron el mundo antiguo, especialmente oculto, de Egipto y sus jeroglíficos.

El empecinamiento de Schliemann (ruinas de Troya) nos demostró que aquellas supuestas aventuras que tan magistralmente narró Homero, estaban basadas en hechos reales y adornadas (como toda épica) de formas prosísticas/poéticas hermosas pero ciertas. Schliemann encontró las pruebas y Homero adquirió otro valor en la Historia y sumó otro título: poeta y cronista a la vez.

Hablamos de miles de años, de pruebas especialmente dificultosas de encontrar por, precisamente, el tiempo transcurrido y la escasez de evidencias.

Pero cuando hablamos de unas décadas atrás, de cuando la prensa ya era un sistema social de importantísimo valor documental (no solo informativo), el alud de pruebas es tal que apenas se indague un poco, ésas pruebas afloran fácilmente.

Así, investigar determinado periodo del tiempo pasado (digamos, por ejemplo, la década de los años treinta a la de los setenta del siglo pasado), debe ser casi un juego de niños para un profesional, para un historiador. Y debe serlo porque no es nada complicado para neófitos, para investigadores aficionados.

Se trata de saber lo que se busca y dónde encontrarlo. Se trata de obtener las pruebas, estudiarlas, ordenarlas y publicarlas.

Pero lo más importante: se trata de mostrar todas las pruebas. Todas.

Confieso (porque nos ha ocurrido muchas veces) que hemos topado con alguna información negativa sobre el Sevilla. Como en todo colectivo, ha habido cosas positivas y otras negativas y teniendo en cuenta que tenemos un siglo largo de historia, sería impensable que no surgiera ésa parte que a nadie gustaría tener. Muchas las hemos publicado y otras, de escaso valor histórico (más como anécdotas), no.

Lo que provoca verdadera admiración y sorpresa (negativas, ciertamente), es que alguien pretenda componer un cuadro totalmente falso del pasado de otro Club. Un cuadro cargado de supuestas pruebas circunstanciales y de testimonios carentes de algún valor objetivo (por el contexto en que se produjeron). Un cuadro, en fin, que tal parece un panfleto destinado a determinados consumidores, a un público fiel que creerá (porque estará deseando creerlo), cualquier cosa que diga, cualquier barbaridad que invente y que ataque el honor, la dignidad o el valor deportivo del contrario.

Es una forma de insistir en una mentira para que termine convirtiéndose en ¿verdad?

Se le han expuesto infinidad de documentos sin necesidad de machacar con cientos de fotografías (esto es un trabajo de investigación y no uno de marketing); se le han mostrado decenas de personajes vinculados directamente con la directiva de su Club; personajes con nombres y apellidos, cargos y su historia particular; se le han señalado las relaciones con los impulsores fascistas que propiciaron la Guerra Civil de 1936; se han descubierto (para la mayoría y especialmente para la parte verde que, nos consta, nos lee) un pasado sorprendente, distinto, muy lejos de la idea idílica que tenía sobre ellos mismos y sobre los demás y se definen, documentalmente, las relaciones de poder entre unos y otros con aquel régimen antes, durante y después de la contienda...

Pero usted, Sr. Del Castillo, ni siquiera ha tenido la cortesía de esperar la conclusión del mismo, de ver todo el documento completo (en un fallo profesional imperdonable e inexplicable) y ha comenzado a huir hacia adelante, a machacar sobre personajes colaterales, a realizar maniobras de distracción y obviar, porque no puede hacerlo, las respuestas a las cuestiones esenciales, a las preguntas clave.

No puede y por eso no lo hará. Se aferrará a cualquier mínimo detalle, lo magnificará y lo expondrá de la misma manera que lo ha hecho siempre. Ocultará lo importante y se anclará en lo anecdótico. Usted es así y ése será su puente de plata.

Usted, con 129 fotografías contra el Sevilla, sigue sin poder demostrar nada de lo que pretende acusarnos. No tiene pruebas. No las hay.

Ahora debería entender que solo tomara una fotografía de su blog. Debería hacerlo porque no es tan complicado.

Usted, con trabajos como ése y siendo historiador, demuestra, sin lugar a dudas, que es mucho más sectario que yo. Infinitamente más porque sabe toda la verdad y solo cuenta una parte: la que le interesa y la que alimenta a un sector del beticismo.

Usted manipula descaradamente y en usted, profesional, es gravísimo.

Puede que a partir de ahora ya no le sea tan fácil. Puede que a partir de ahora tenga que justificarse. Puede que tenga que explicar, de puertas adentro, lo que si muestra

LA PALANGANA MECÁNICA

Ha sido un trabajo inmenso, apasionante (como toda labor de investigación de éste Equipo), siempre divertido y con sorpresas llamativas.

Con el titular de La Palangana Mecánica a la cabeza, una alineación de lujo.

Gracias a todos por dejarme participar.

Shahmat.

Cuidaros.

4 comentarios:

Tántalo dijo...

Es que no es lo mismo ser LICENCIADO EN HISTORIA, algo muy loable y meritorio, lo cual te aporta los conocimientos necesarios sobre las herramientas que se deben usar para ejercer dicha profesión y ser HISTORIADOR, es decir, ejercer la profesión mediante la utilización de los citados conocimientos.
Definitivamente una cosa y la otra no son exactamente lo mismo, aunque semánticamente se parezcan.
Un abrazo.

PD: Genial, como siempre...

Jose Manuel Ariza dijo...

Saludos.

Se me ocurre algún que otro sinónimo divertido, pero lo dejaremos ahí.

Grcias, joven.

Cuídate.

ajmiguel dijo...

He estado viendo lo que expone el foro de betislibre y es lo mismo de siempre, osea echarnos mierda encima,se limita a repetir escenas que por estar en la dictadura estaban
obligadas a cumplir todo el mundo pero lo que no cuenta es que muchos de su equipo eran gentes importantes
golpistas de la dictadura y beticos
vamos los que tenian la sarten por el mango,falangistas,comandantes y
hasta generales que perjudicaron mucho al Sevilla F.C.por ejemplo en
el CASO ANTUNEZ y ayudar a su equipo en muchas ocasiones y para boton de muestra,las condiciones que le dieron del ESTADIO DE LA EXPOSICION,un regalo en contra de mas de la mitad de Sevilla

Jose Manuel Ariza dijo...

Saludos, D. Ajmiguel.

Hay otras muchas cuestiones en las que han tratado de perjudicarnos. Muchas.

Pero con el famoso "nosotros a lo nuestro", cada vez están más lejos, más atrás.

Ellos sabrán lo que hacen.

Gracias.

Cuídate.