miércoles, 10 de diciembre de 2008

SON MIS COSAS

Saludos.

Hace algún tiempo me impliqué de tal forma en los chats que acabé con problemas emocionales. No graves, ciertamente, pero me produjeron días de intenso malestar, de decepciones, de pseudo depresiones…

Tuve una época my triste y los pocos momentos buenos no se compensaban con las desilusiones que me duraban días.

Era el mundo de los amigos virtuales. Era el mundo que me creé, quizás huyendo de otros problemas reales, quizás queriendo escapar de una vida poco satisfactoria.

Los chats no me ocasionaron ningún fracaso… ya había fracasado antes y ésos mundos de la pantalla solo contribuyeron a culminar un proceso oscuro, de abatimiento y que no solucionaron las ansias de evadirme que me quemaban.

Pero llegó un momento en que la razón se impuso. Llegó el momento de reflexionar antes que terminar definitivamente hundido. Llegó el instante de inflexión en que te dices que no puedes seguir así, que no puedes acabar dentro del pozo porque te quedan muchos momentos de vida, muchas cosas hermosas que conocer, muchos libros que leer, muchas personas que conocer y querer…

Llega el momento de apostar por ti mismo.

Y apuestas.

Decides que la vida es más importante que el resto de las cosas; descubres que aún puedes amar; que aún puedes hacer feliz a alguien; que hay a quien le importas. Decides que la pantalla es solo eso: una pantalla y te replanteas muchas cosas. Todas las cosas.

La pantalla, desde ése momento, se convierte en tu amiga, en tu aliada. Es la llave para CONOCER personas, para conocer personas en PERSONA, para acortar distancias, ideas y sentimientos.

Es solo un medio y cuanto antes lo entiendas, antes tendrás un compinche de posibilidades sin límite.

La pantalla de internet me ha procurado tantas cosas que ahora, pasado los años, sigo sin entender que hubo un tiempo que me tuvo atrapado y que todo en mi vida giraba a ése rectángulo luminoso por donde me asomaba al mundo.

Resulta que el mundo no es la pantalla. Resulta que el mundo está lleno de gente, de buena gente, de PERSONAS inmensas que merece la pena besar, abrazar, estrechar, querer… que merece la pena escucharlos y decirles cosas, que esperan que estés ahí cuando les haces falta, que necesitan que les digas una cosa bonita porque eso le anima, le ayuda y les hace, por unos instantes, felices; que necesitan compartir contigo y tú estás dispuesto a dejarte compartir; que hay una palabra que no tiene precio: AMISTAD.

En la pantalla encuentras AMIGOS.

Pero son reales. No son letras ni imágenes. La pantalla es solo un instrumento para llegar a sentir el contacto físico, para tocar, para sentir, para mirar, para recibir.

Solo cuando comprendí que la pantalla era un medio, acabé por salir de la zona oscura, del mundo engañoso de las letras MUERTAS y desperté, de nuevo, a la vida. La REAL.

Hoy, la pantalla es solo un medio. En la pantalla encuentro INFORMACION, CONOCIMIENTO, UN MUNDO SIN FRONTERAS, LAS DISTANCIAS NO EXISTEN y LOS SUEÑOS SE HACEN REALIDAD.

En la pantalla os conocí a vosotros y conoceré a los demás.

Gracias por estar ahí, amigos.

Un día, en cualquier instante, os daré un beso y un abrazo.

Cuidaros.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

GRACIAS A TI solo a ti, que hemos seguido tu camino, que nos as indicao el paso a seguir. que grande eres y seras por siempre

guilmar dijo...

Has sabido salir, enhorabuena. Y te lo digo porque leyendo tu post me he sentido plenamente identificado. Hoy por hoy estoy totlamente "curado" de esta droga y a lo sumo, escribo, como aquí, comentarios y en los foros. Los amig@s virtuales son más peligrosos que los reales, ya que éstos son físicos y sabes defenderte llegado el caso. Me alegro de que hayas salido de este mundo de mentiras e hipocresías.
Un saludo

guilmar dijo...

No suelo leer los comentarios que ponen, pero este sí. Me da la espina de que este anónimo es alguien familiar tuyo muy directo.
Un abrazo, Guilmar